Este tiempo ha sido de re estructuración de emociones, conceptos y razones para seguir pintando, amando y esperando…
Después de mi ultima exposición entre en un estado de molestia donde no resulto buena compañía para nadie, así que sólo me he concretado a caminar con mis perros, dibujar en mi libreta, completar algunos dibujos que ya tenia plantados, dormir por largas horas y leer si es que eso ayuda en algo. También descubrí la tecnología digital pues me compré un DVD, y mira que es diferente ver mis películas en la TV que en mi computadora, además podré ver las que he bajado de la red que siempre querido saber si tiene todas esas monerías de opciones que tienen los DVD. También me compré una impresora y wow!! Como es posible que no tenga arreglo y que sencillamente si fallan sólo hay que tirarlas, que por cierto no me atrevo a hacerlo aun, y bueno esos son los juguetes nuevos que distraen, pero no llenan absolutamente nada mas que el gusto de tener lo ultimo de lo ultimo.
Hace unos días me invitaron a dar una plática en la Universidad Anahuac, lo cual me sorprendió púes si bien es halagador de entrada, también me hace pensar en que será lo que les pareces interesante como para llamarme y dar una platica que en este caso me pidieron que fuera sobre dibujo, “mi dibujo” y eso me hizo pensar, ¿qué puedo hablar de mi dibujo? Que es interesante a los ojos de los demás o sobresaliente, si tan solo ha sido una búsqueda interna? Y bueno, encontré mi historia de porque y como comencé a pintar… y mira que fui atrevido, no sé dibujar y en ese tiempo mucho menos que lo que se ahora, pero fue la emoción y necesidad de la catarsis la que provoco que hiciera esas pinturas en “wash” la que provoco que pintara una imagen de mis perros y de mi mismo… pero siempre y todo el tiempo he dibujado, mis primeros recuerdos son de lápices de colores y papeles, y de eso hablé. De cómo el dibujo se convirtió en algo importante que finalmente ha venido a cuestionar todo mi trabajo y por lo tanto mi vida. Dibujar es lo mas fácil que puedo hacer, sin mucho que pensar y sin mucha preparación, tan sólo es la necesidad inmediata de querer reproducir lo que mis ojos ven, y eso lo convierte en lo mas fácil del mundo, pues sólo tomo mi libreta y dibujo y hago lo mismo con los grafitos, no es mas que papel y lápiz y no hay nada mas detrás de eso. En cambio con el lienzo hay una intimidación y un querer que termine bien, que se parezca al modelo, que sea coherente,, que las proporciones sean claras que la sombra, que la luz, que el color, y eso… no lo tiene mi dibujo, es mas simple, parece que esto les gusta y yo entro en conflicto pues debo tratar de que mis pinturas tengan esa “frescura” esa primera intención que tienen mis dibujos. Y todo eso tiene que ver con la pincelada, con la forma del acabado, con no retocar o delinear las formas… digamos que eso le da un dejo de descuido que causa una impresión diferente en el espectador, ja, el espectador que es en el que trato de no pensar, pero que inevitablemente siempre esta.
Y bueno, la platica me ayudo mucho mas a mi que a los alumnos, me permitió ver mas claro a donde voy y como hacerlo, sigo pensando que no debo pensar en el de enfrente pero si hacerle caso a mi voz interior que me pide subir mas en mi apreciación de la formas y del color en el mundo, y es ahí donde caigo y veo con mas claridad lo que debo hacer y finalmente, comencé en estas semanas a hacerlo, y tomé los óleos que había comenzado y que no avanzaba… el retrato de la novia de mi sobrino, me gusta mucho, pero como siempre la gente no ve reflejado lo que de si mismo creen e insiste en que no se parece, pero en realidad le molesta mas la idea de saber que he retratado a todas las mujeres de mi sobrino. El retrato de mi sobrina me encanta, me parece que comienzo a logra un poco de lo que el dibujo ha venido a cuestionarme, las piezas que comencé con Oliván, están casi terminadas las dos, bueno el “naufrago “ya lo terminé y estoy por concluir el de la gola. Que me gusta mucho como va y aunque la emoción primaria por hacerlos no se ha extinguido, son piezas que estoy seguro que al terminar, lo único que querré hacer con ellas será lapidarlas y no verlas más. Y no es por el desdén ni por ardor, ni por nada, solo es por sanidad mental. 
Tengo que terminar los cristos para este fin de mes, tengo que lograr lo que hice con los acrílicos en mi libreta, y creo que lo haré. Me siento mas seguro con todo eso. Ya veremos.
Mis hijos están bien, pasamos muchas horas en casa y con esta lluvia y ante los truenes, me da un ataque de sueño que solo me provoca meterme a la cama con ellos, subir mis pies sobre Libertad para darle seguridad, abrazar a Gilberto que pega su cara en mi pecho y taparnos hasta las orejas para conservar el calor y dormir juntos mientras pasa la tormenta. Pareceré exagerado pero,… es lo mejor que puedo hacer y la única forma de conservar el calor corporal y no sentir que me enfrío, detesto el frío y la lluvia, la detesto como el hambre en la madrugada sin nada que comer. Y además no me interesa entender porqué. Pero anhelo el sol, el calor y un mar reflejando la vida que no es otra cosa que los ojos de Dios en mi cara.
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