En esta semana también tengo problemas con la red de mi casa y estoy desde el jueves pasado sin ella, ¡que horror! Cuanta dependencia… es increíble que el hecho de no poder acceder a ella cuando me de la gana me causa bronca…que acostumbrado estoy de poder acceder sin problemas en el momento que quiera, que en mis ratos de ocio pueda entrar en este mundo que es la Internet y el no poder hacerlo me cause hasta depresión, jejeje. Pero bueno lo increíble es que cuando menos lo pensaba este domingo en una charla de tres horas en mi estudio con Alma una mujer que desde hace mas de un año me externaba que quería una pieza mía, así sin casi darme cuenta se quedo con dos piezas, un dibujo y un óleo del año pasado que por cierto, aparentemente no había tenido suerte, pues el año pasado cuando lo termine lo colgué donde siempre pongo las piezas que necesito que sequen para poder empacarlas, en eso días, si no mal recuerdo por ahí de octubre, hubo una tromba que resonó en toda la ciudad… Gilberto en su desesperación por huir de la tormenta trató de trepar las paredes (se habrá sentido araña) y tiró el cuadro já, no solamente lo tiro, sino que rasgo en el hombro la imagen y bueno había que restaurarlo para la exposición, la de diciembre pasado, pero no paro ahí, cuando envié estas piezas por paquetería, en la transportación lo rasgaron de nueva cuenta pero esta vez en el fondo de la pieza, como me di cuanta al momento de desempacarlo, tan solo atine a quitarle el bastidor a la tela, y traerlo de nuevo a la ciudad para restaurarlo nuevamente. Lo tuve guardado en mi estudio, hasta que Alma lo vio y pidió sacarlo para mostrárselo, le encantó y decidió llevarse ese, “Pasión II” y el dibujo de Dulce compañía” para su nuevo negocio que será una cafetería. Que curioso, después de 10 años aquí en este departamento, ahora que comienzo a despedirme de el… seré mas público con mi obra expuesta, porque Alma no se cansa de decirle a sus comensales que yo soy el autor de esas piezas… y mi reacción ante eso es como la de un niño avergonzado y solo atino a sonreír nervioso y esquivando cualquier posibilidad de dialogo con nadie. Libertad y Gilberto es suficiente atracción para que además los ojos de la gente se posen en mi persona. Y bueno lo maravilloso de todo esto es que mis cuadros les gusten y paguen mis cuentas…
Comienzo a despedirme a ver con detalle mi estudio, a ver con nostalgia mi espacio… y a dar gracias por estos diez años de aventura. Aquí llegue cuando regrese a México después de haber vivido en La Habana y de haber logrado ahí, lo que hasta en ese momento no tenía… este departamento me recibió con un rayo de sol sobre el piso cuadriculado que inmediatamente me recordó el de mi casa de niño. Cuando vi esa luz me enamore del lugar y me vi instalado ahí, claro… era un espacio que apenas llenaba con mis pinturas, libros y mi cama no tenia muebles no había heredado nada. No televisión, no musica, no cocina ni nada, Pero me sentía bien con Libertad y entonces Quetoli que vivía conmigo y unas inmensas ganas de estar en paz en medio de todo eso. Aquí viví un amor que me llenó el vacío que era mi alma y llenó mis ojos de luz y esperanza. Un amor que plasme en cinco años de trabajo creativo y que al final se desvaneció en la indiferencia de su parte y el dolor de su ausencia, un malestar metido en mi cama con Libertad, Gilberto y Fosco mis perros de entonces y mi dolor. Pero viví hasta la última consecuencia y fui feliz, encontré el equilibrio para asumir mi nueva condición y seguir haciendo lo único que se hacer… estoy muy agradecido con este espacio le doy las gracias por las tardes de sol y calor, donde dormíamos sudando hasta sentir sed y despertar, por los eternos domingos donde dibujaba todo el día, por contener tantas ilusiones y tanta fantasía, por el erotismo por el regodeo, por el amor que recibí
Creo que lo ultimo que sacaré de aquí será mi cama… mientras acondiciono mi nuevo estudio… dormiremos aquí, le diremos adiós, despacio, sin prisa...
Continúa…
No hay comentarios.:
Publicar un comentario