Comer enchiladas de mole poblano con pollo y un pan bolillo crujiente, siempre me remiten a la boda de mis hermanas... Mientras daba el primer bocado, vinieron los recuerdos de mis padres y las risas y las conversaciones de sobremesa. Mi madre como buena matrona, siempre hizo bodas donde literalmente se tiraba la casa por la ventana. Vivíamos en una casa muy grande en el centro de la ciudad de México, quitaban las recámaras y ahí y en el patio se instalaban mesas para los comensales, qué siempre era un mundo de gente. Tíos tías primos, vecinos, compadres, amigos y uno que otro colado llenaron mi casa para comer el tradicional mole poblano con pollo y arroz. Era la locura, por qué además, se instalaba una orquesta en los pasillos de arriba, eran al menos de 20 músicos, era algo verdaderamente increíble nada comparado con las celebraciones a las que he asistido ahora de grande y que ala modernidad provee. Y todo por comer enchiladas poblanas. Ya cumplieron 13 y 14 años de muertos mis padres y los extraño mucho aun.
Después de ese delicioso almuerzo en solitario, regresé a mi estudio, a seguir dibujando el retrato que me encargaron y a terminar estos ejercicios que comencé en la semana. Los pies, son un elemento que a veces no aparecen en los cuadros y que particularmente me parecen muy atractivos. no soy fetichista de ningún modo, pero me gustan o quizás soy muy consciente de ellos, por la danza que de alguna forma, me permitió mirar muchos pies desnudos y los míos propios. Y siempre me parecieron estéticos o al menos me hicieron darme cuanta de la belleza que pueden tener algunos pies.
Así que usando estás tablas comencé unas piezas que terminaré en este fin de semana,. y me gusta, me gusta tanto que ahora que compre más material y que tenga un sobrante de madera así de angosto, haré más detalles de pies, sólo como divertimento y sólo para ejercitar mi ojo y mi mano.
El detalle del pubis de abajo, es una idea que tengo de un cuadro más grande y completo de un hombre sentado, asi... quizás con los brazos cruzados, quizás... aun no lo sé.
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