Hace días me llamaron para ofrecerme hacer una entrevista,y a esas cosas siempre digo que si... Pues nunca sabemos qué puede pasar con eso, finalmente todo es difusión y siempre me conviene... Jamás me imaginé que fuera algo tan de jóvenes y en vivo... y eso fue lo sorpresivo. La chica que me entrevistó; Luna Jazareth, es muy jovencita, tan sólo tiene 16 años, pero me soprendió lo segura que estaba de si misma. Amable, educada y siempre correcta, ví que tenía mucha información de mi, de mi trabajo, de mi trayectoria... y en la entrevista, fue mucho más sorprendente que al ser en vivo y por internet, estuvimos conversando con más de 2700 personas... haciendome pregunta, mirando los cuadros que encontraban en la red, leyendo este diario... Fueron 2 horas de charla. Al final hicimos un recorrido por mi estudio y asi termino... Yo, muy cansado y gratamente sorprendido... : Sin duda estas nuevas generaciones, si bien puedo decir que hay mucha gente medio perdida... conocer a Luna, me devuelve la confianza en que entre los jóvenes de ahora, hay mucha gente con talento y dedicación.
Eh avanzado muchísimo en la calavera, seguro la termino este fin de semana... y me inventé una historia para poder hacer este cuadro... de repente pienso que es el cráneo deforme de alguien y por alguna extraña razón, también veo en sus boca una bóveda de una iglesia... Sé que se escucha absurdo... y que quizas soy el único que ve eso, pero es así, anoche mientras levantaba los pinceles y todo... ví entre la penumbra de mi estudio eso... una Bóveda de iglesia entre sus mandíbulas... y me causó gracia y emoción, porque quiere decir... que poco a poco... la pieza va siendo mía, a pesar de que es una idea que me dieron para realizar.
Por otro lado, en mi ciudad ha estado haciendo un calor que pocas veces había sentido o al menos, no por tanto tiempo... me encanta que haya esa temperatura, porque hace que sienta que mi cuerpo está vivo, que no sólo soy una mente y que mis músculos se tensan y se sienten... estoy seguro que en mucho esto está provocado por el yoga que ya voy en mi tercer mes... y que si bien, aparentemente es algo totalmente físico... algo está pasando en mi mente que me ha hecho mucho más receptivo a sensaciones que creía dormidas... Como dato curioso, no me resistí a hacer pública esas fotos... y las subí en instagram, ... ¡wow!... la cantidad e gente que la ha mirado y los comentarios... me hacen pensar muchas cosas... yo que después de los años en que hice ballet y danza contemporánea, donde mi cuerpoi era el tema central de mi vida para expresarme y que ahora a mis 53 años, desde hace muchos años lo he mantenido tapado... quizás es momento de sentirlo de nuevo, como algo muy mío... finalmente es el cuerpoo que tengo y con el que me comunico con el mundo, fuera de mi.
Sigo dibujando en mis libretas, sigo trabajando todos los días en ellas y en mis cuadros, en entender la forma en hacer que mi mano haga detalles pequeños en mirar con exactitud lo que veo y no lo que sé que hay ahi...
... y a veces me sorprende lo que sale de mis plumillas... lo que logro con trazos tan libres, tan de primera intención y quiero hacer eso mismo en formatos más grandes, en cuadros en óleo ... es una idea que le he estado dando vueltas... incluso, estoy tratando de pasar en grabado algunos apuntes, pero como bien dice Aurea... hay ideas que se prestan mejor para otras técnicas, así que tendré que entender qué es lo que puedo hacer como grabado y qué es lo que no. Y seguir dibujando todos los días...
Y bueno... en estos días vino un amigo pintor que quería solo charlar conmigo de varios tópicos y entre risas y preguntas... me hizo una que me cayó por sorpresa... -¡Qué se siente ser Darío MIjangos?- ... me dejo sin habla, porque mi primera respuesta mental fue... a veces, mucho, pero mucho miedo... y otras, ni cuenta me doy de quién soy.
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