My heartsick and eyes filled up with blue...

Se extingue el año... y haciendo recuentos ha sido un año de luchas internas... de lucha para ganar mi salud, para ganar mi tranquilidad emocional, para ganar tiempo al tiempo y enloquecer pintando. Pero,¿qué he ganado de todo esto?... sin duda estar vivo y sentir es lo mejor de todo... Fue un año en qué fui al mar, en Puerto Escondido y en Nueva York, vi y sentí el sol, caminé sintiendo el aroma de las flores, estreche manos amigas, sinceras. Miré, respiré y sentí arte. Amé con paciencia estoica. Abrace a mis hijas días y noches enteras, soñé con Quetoli y Gilberto, mire a Libertad dormida, contemple la mirada de Uma, expectante, serena y llena de complicidad. Tome largos almuerzos con mis hermanas Leticia y Carmen. También lloré y mucho... Pero me siento vivo, contento con lo que soy, consecuente con lo qué siento y creo, asumido en quién soy , aun qué no sepa como es qué llegue a serlo. Ha sido un buen año, lleno de amor dentro de mi, lleno de Dios, y de buenas personas cerca. Dicen que más vale amigos qué dinero... y de eso tengo mucho. Y mucho qué agradecer a Dios.

Aun no termino mis cuadros, yo esperaba estar en casa encerrado, trabajando, pero me he sentido demandado para salir, y hacer varias cosas fuera. Este pinche frio que me provoca malestar en las vías respiratorias, me ha bloqueado algunos días que me han obligado a estar encerrado. Sin hacer nada... Mi corazón esta enfermo... y mis ojos llenos de tristeza, afortunadamente, nada es eterno, y voy a sanar.