Pasé un fin de año, muy diferente a los últimos 10 ... me siento contento, tranquilo, entusiasmado por todo lo que estoy viviendo... y aprendiendo... si bien, la parte de la venta de mi obra es lenta y a veces me angustia... lo que he vivido no lo cambio por nada... estos meses pasados ha sido de mucho aprendizaje, de mucho amor al mi alrededor, de muchos placeres insospechados y de una tranquilidad que hacía mucho anhelaba y no tenía... Mi família, tiene sus problemas, pero poco a poco nos vamos adaptando a las nuevas formas de vivir... y parece que al fin hay cierta paza en ellos.
Lo último que hice como parte del fin de año, fue comer ese delicioso pan que le llamamos "rosca de reyes" una tradición que en México está muy arraigada, y que mi família tampoco celebra, pero que desde hace unos años, no puedo resistirme a celebrar con los chicos del club, mis hermanas y ahora, en este año con Áurea en su casa con mi hija... Aun me acuerdo cuando me trajeron "Los Reyes" un tarro, un pan y un muñeco de trapo en mi primer departamento... Siempre le estaré muy agradecido a Luis Enrique por ese gesto... porque me recordó, lo maravilloso que es vivir una ilusión de magia y ficción.
Tengo muchos planes para este año que comienza... y un proyecto importante que ya comencé a realizar, Gil... estoy tranquilo y feliz, pese a la incertidumbre de las ventas... pero bueno, esa siempre será una incertidumbre que debo atacar.
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