Algo pasa qué no puedo dormir, no es pensar en el dinero, porqué no me falta, tampoco en qué siento frio, porqué hace mucho calor, tampoco es el calor, porque duermo con ventanas y cortinas abiertas, y a mi cama llega el aire fresco... Comienzo a creer qué son los "fantasmas" de mi vida que se agolpan en mis sueños y eso me despierta. Comienzo a conciliar el sueño y comienzo a ver seres indeseables que acercan su nariz y me huelen como perros las orejas. Será qué, ¿algo extraño?... no lo sé. Es quizás la posibilidad de algo frustrado lo qué me altera, la posibilidad, de mirarme en los ojos de alguien lo que me perturba y la frustración de los destiempos.
El último cuadro no le gusto a Tamayo, la composición y la mala foto hacen parecer que esta manco, dice él, curiosamente a mi me gustó mucho, pero entiendo que al final "el cliente" es el que debe estar satisfecho con la imagen (qué difícil es dar gusto) y cómo me detiene esto, no quiero agarrar el pincel. Ante esto le dije que es más difícil corregir una pieza qué hacer una nueva y estoy haciendo una... pero como en la composición debe ir las manos al costado, hacer eso en un formato tan pequeño me limita, mi mano no me da para los detalles, y sólo espero qué esta vez le guste. Estaba a punto de tapar la pieza, pero me escribió diciéndome que quería la pieza original también... Muy bien, es dinero para mi, pero me doy cuenta qué la aceptación de mi obra es más importante, ¿será que tengo el ego muy grande, cómo me dicen?... no lo sé.
Y ante todo esto Gil,.... me doy cuenta qué lo único qué quiero es pintar, pintar, dibujar, y pintar... nada más. por el placer de hacer, y crear. sin sufrir.
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